La conmemoración del Día Internacional de la Mujeres este 2024 está marcada por el asesinato de más de nueve mil mujeres en Gaza. “La guerra en Gaza es una guerra contra las mujeres”, afirmó ONU Mujeres y hago eco de esa afirmación, excepto que no es guerra, es genocidio.
Es imposible conmemorar o enviar mensajes alentadores mientras las mujeres y niñas como todo el Pueblo Palestino, sufren por meses ataques permanentes por las fuerzas de ocupación israelíes.
Mi mensaje a las mujeres del mundo: todos debemos trabajar para poner fin a esta ocupación por todo lo que sufre el pueblo palestino. Las mujeres palestinas fueron, son y seguirán siendo un símbolo de firmeza y sacrificio…
El mayor número de víctimas de los ataques israelíes contra Gaza son mujeres y niños. Hoy en día, las mujeres de Gaza se han quedado sin hogar, viven en tiendas de campaña, dan a luz al aire libre, entierran a sus hijos con las manos y sufren hambrunas.
Las mujeres palestinas enfrentan el trauma de la pérdida; pérdida de seguridad, protección, familia, hogar, empleo, educación y todo lo que constituye una vida normal.
Históricamente, las mujeres palestinas han llevado el mensaje de supervivencia y firmeza.
Se enfrentan a múltiples desafíos y el más importante es la ocupación y el control continuo sobre la tierra y el pueblo. Pero ya no es ocupación, es anexión.
Pero, ¿dónde está la voz internacional de las mujeres respecto al sufrimiento de las mujeres palestinas?
Las necesitamos para mantener la identidad femenina palestina. Sin las voces de las mujeres internacionales exigiendo el fin del sufrimiento de las mujeres palestinas, el mensaje mundial perderá mucho.
Necesitamos que las voces de las mujeres internacionales sean más amplias y fuertes. Muchas mujeres líderes podrían haber planeado un papel más generalizado para poner fin a la epopeya catastrófica que presenciamos hoy en Gaza.
Al mismo tiempo, expreso mi más sincero agradecimiento a las mujeres líderes que han sido la voz de las mujeres sin voz en Gaza.
Debemos trabajar para garantizar que las mujeres palestinas estén bien.
Todas las personas debemos trabajar para poner fin a esta ocupación y detener el sufrimiento del Pueblo Palestino, mujeres y niñas como también niños, hombres y adultos mayores.
Las mujeres palestinas desafían este genocidio por el bien de la vida y la libertad de la ocupación.
Que las voces de las mujeres en todo el mundo se levanten con más fuerza denunciando el sufrimiento de las mujeres palestinas y pidiendo un alto al fuego. Sólo así resguardaremos la vida y el patrimonio cultural femenino.