La derecha gobernante israelí provoca escalada para replicar en Cisjordania la destrucción y desplazamiento de la Franja de Gaza
– Un ataque de un gran grupo armado de colonos de Ben Gvir a Burin detonó la situación en Cisjordania.
– Israel subestima el consenso internacional estadounidense que rechaza los asentamientos y los crímenes de los colonialistas
El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados condena enérgicamente las violaciones y crímenes de las fuerzas de ocupación, las milicias de colonos y los elementos terroristas de Ben Gvir, a quienes Ben Gvir supervisa, arma y brinda apoyo, protección política y legal de diversas maneras y medios.
El ejército de ocupación continúa invadiendo toda la zona de la Cisjordania ocupada, incluida Jerusalén Oriental, con falsos pretextos, causando más mártires, detenciones masivas e intimidación de civiles palestinos en sus ciudades, campamentos y ciudades.
El último de los cuales fue el asalto al campus de la Universidad Al-Najah y el arresto de 25 estudiantes, en medio de la implementación gradual de la destrucción masiva de Gaza en las zonas palestinas de Cisjordania, a la luz de la incitación más amplia de la extrema derecha israelí gobernante para hacer estallar la situación en Cisjordania, crear un estado de caos para lograr objetivos políticos flagrantes, el principal de los cuales es acelerar la progresiva anexión de Cisjordania, destruyendo cualquier resultado de los acuerdos firmados y eliminando la oportunidad de lograr un Estado independiente para el Pueblo Palestino.
Esto se produce en la integración y clara distribución de roles entre el ejército de ocupación y los elementos terroristas sionistas supervisados por el dúo fascista Smotrich y Ben Gvir, como ocurrió ayer en el ataque de un gran grupo armado de milicias de colonos a la ciudad de Burin y su ataque a las casas de los ciudadanos, intimidándolos y quemando sus vehículos, así como la invasión de los colonos al desierto palestino y a las comunidades beduinas, sus hogares y sus cuevas en toda la Cisjordania ocupada, como sucede constantemente en todos las zonas del Valle del Jordán, Masafer Yatta y las zonas orientales de Belén.
Los colonialistas armados, con la protección del ejército de ocupación, continúan cometiendo crímenes de desplazamiento de estas comunidades, abusando de ellas e imponiendo desplazamientos forzados sobre ellas para poder evacuar las tierras en que viven para que les sean asignadas, en favor del asentamiento.
El Ministerio considera con gran seriedad los resultados y las repercusiones de la escalada sistemática israelí en la Cisjordania ocupada, incluida Jerusalén Oriental, especialmente el ataque de un gran grupo armado de colonos a la ciudad de Burin para imponer un estado de miedo a los civiles palestinos para obligarlos a emigrar fuera de su patria y ve esto como un desprecio hacia la Comunidad Internacional, incluidas las reclamaciones estadounidenses.
Para frenar a los colonos, detener sus ataques y agresiones y exigirles responsabilidades, este es un mensaje claro a la Comunidad Internacional de que el gobierno de la derecha israelí encabezada por Netanyahu no presta ninguna atención a la legitimidad internacional ni a las posiciones de los países, incluso aquellos que apoyan a Israel.
Es más, Netanyahu y su equipo extremista están explotando la laxitud y la debilidad de la posición internacional para cometer más crímenes contra los palestinos y continuar los crímenes de la actual anexión de la ocupada Cisjordania, lo cual requiere el consenso internacional para impedir los asentamientos y los crímenes de los colonos en acciones y medidas prácticas que obliguen al Estado ocupante a detener los asentamientos, desmantelar las milicias de colonos, agotar sus fuentes de financiación y quitarles la protección política e implementar las resoluciones pertinentes de la ONU, especialmente la Resolución 2334 y brindar protección internacional al Pueblo Palestino, que es una protección para la solución de dos Estados, ya que es la clave para la seguridad y estabilidad en el ámbito del conflicto, la región y el mundo.
Ramallah, 15.01.2024