La decisión del Knéset israelí de clasificar a la UNRWA como una organización “terrorista” es una hostilidad premeditada que tiene como objetivo disolver la cuestión de los refugiados de Palestina y una violación de la Resolución 2730 (2024) del Consejo de Seguridad de la ONU.
El Ministerio afirma sus continuos esfuerzos políticos, diplomáticos y jurídicos para garantizar la implementación del mandato del UNRWA de conformidad con las resoluciones de legitimidad internacional.
El Ministerio considera que la aprobación en primera lectura por parte de la Knéset israelí el lunes 22 de julio de 2024 de un proyecto de ley que clasifica a la UNRWA como “organización terrorista” es una hostilidad premeditada que tiene como objetivo eliminar la cuestión de los refugiados palestinos y su derecho heredado a regresar de conformidad con las resoluciones de las Naciones Unidas.
Esta decisión forma parte de una campaña sistemática de incitación llevada a cabo por Israel, la potencia ocupante, que se puso de manifiesto durante la reciente guerra genocida contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza, tanto a través de declaraciones públicas de funcionarios israelíes como de ataques contra la UNRWA, sus funcionarios, su sede, sus instituciones, sus recursos y su personal, como quedó ejemplificado ayer por el ataque de las fuerzas de ocupación israelíes contra un convoy de ayuda de las Naciones Unidas que se dirigía a la Franja de Gaza.
Afirma también que se trata de una clara violación de la Resolución 2730 del Consejo de Seguridad de la ONU, adoptada el 24 de mayo de 2024, que obliga a los Estados a respetar y proteger a las instituciones de la ONU y a los trabajadores humanitarios, disposición que se aplica a la UNRWA, sus instituciones y su personal.
El Ministerio reafirma sus continuos esfuerzos políticos, diplomáticos y jurídicos para garantizar que el mandato del UNRWA se implemente lo más eficazmente posible de conformidad con las resoluciones pertinentes de la Asamblea General, incluidas las Resoluciones 194 (III); 302 (IV) y todas las demás resoluciones relacionadas.
Hace un llamado a intensificar los esfuerzos internacionales para preservar el mandato del UNRWA y garantizar su sostenibilidad hasta que se hagan realidad los derechos de los refugiados de Palestina y se logre una solución justa, de conformidad con el Derecho Internacional y las resoluciones de las Naciones Unidas, en particular la Resolución 194 y el derecho a regresar de los refugiados a sus hogares de los que fueron desplazados por la fuerza.
El Ministerio hace referencia a la opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia, que afirmó que Israel no tiene soberanía sobre el territorio palestino ocupado, incluida Jerusalén Este, que se encuentra dentro de las zonas de operaciones de la UNRWA. El Ministerio insta a la Comunidad Internacional a alinearse con la postura palestina y rechazar la decisión del Knéset, considerándola como otra herramienta para reforzar la ocupación y la opresión del pueblo palestino. Además, el Ministerio pide boicots y sanciones contra todos los que votaron a favor de esta decisión injusta.
Palestina, 22 julio 2024