traducción no oficial
Exigimos la imposición de sanciones disuasorias al sistema colonial racista, el desmantelamiento de las milicias terroristas colonialistas y el procesamiento de sus miembros.
El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados condena el brutal ataque cometido por bandas terroristas de colonialistas en la aldea de Jit, al este de Qalqilya y lo considera una peligrosa escalada de los crímenes contra ciudadanos palestinos en toda Cisjordania, que cometen bajo el protección del ejército de la ocupación, que interviene para reprimir a los ciudadanos si se defienden.
El Ministerio considera con extrema seriedad la naturaleza de este ataque, especialmente porque se trató de un ataque organizado de un grupo armado en el que participaron aproximadamente 100 terroristas, con la intención de matar y provocar el martirio del joven Rashid Al-Sada y herir de otros, además del incendiar varias viviendas, vehículos y propiedades de ciudadanos palestinos.
Aquí nos preguntamos: ¿Cómo movilizarían estas bandas terroristas a 100 de sus miembros armados con armas Ben Gvir y atacarían una aldea palestina si no se hubieran sentido protegidos, seguros y apoyados política y legalmente? Cabe señalar que estos ataques no son los primeros, ya que nos recuerdan más de una vez el ataque a Hawara, su incendio y otros crímenes.
El Ministerio pide una vez más una postura internacional seria que obligue al Estado ocupante a desmantelar los puestos de avanzada terroristas y las milicias diseminadas por toda la Cisjordania ocupada; agotar sus fuentes de financiación; levantarle la protección política y jurídica; arrestar a sus individuos criminales y obligarlo a poner fin a su sistema colonial de la tierra del Estado de Palestina y a su sistema de discriminación racial en la Palestina ocupada. El Ministerio confirma que el ataque masivo a Jit es una prueba de que las sanciones impuestas por varios países a algunos elementos terroristas son insuficientes y no constituirán un disuasivo para que pongan fin a sus crímenes y exige la imposición de sanciones disuasorias a todo el colonialismo de colonos y a quienes lo respaldan e incitan a esta brutal violencia y terrorismo por parte de funcionarios israelíes, antes de que sea demasiado tarde. También pide a la Corte Penal Internacional que asuma rápidamente sus responsabilidades a este respecto. Detener la guerra de genocidio contra nuestro pueblo y brindar protección internacional es una condición previa para otorgarle el derecho a la libre determinación con libertad y dignidad.
Palestina, 16 agosto 2024